La sádica guardiacárcel de esta prisión (Laetitia Bisset), se erotiza al ver cómo las reclusas son sometidas sexualmente, en Fuga di mezzanotte aka Midnight Obsession.
Recuerda, Il Marchese de Sade, viejo y preso, aquellas escenas de la infancia con las imágenes de las damiselas (una de ellas, Valentina) que lo iniciaron en la senda de la perversión.